jueves, 26 de abril de 2012

Pedregoso camino.



Por pedregoso camino camino solo paseando mi trasegar. Al lugar donde los atardeceres saludan al mediodía. Donde se contempla el Sol cuando a anochecido y la Luna pega puñaladas a los girasoles mientras se giran confusos. Donde un paseo en barca es posible por mares dulces donde los peces se ahogan. Un sitio donde se han construido retazos haciendo crecer ruinas nuevas. Donde no mascar lo tragado al fondo de un lago no dragado.
Sitio donde hay algo fuera de estas paredes por dentro vacías. La luz deja de describir su tortuosa silueta cuando cambia. Extrañado del mundo allá, solo en su abandono. Al pie de una muralla de hielo donde la quimerica calma impide toda señal de cambio. De noche se desconoce que oculta la marea negra cambiante y expectante de la Luna ¿Perdición o Salvación? Piel rompiendose en la obsidiana superficie cuando todo se torna frío. Frío que todo abarca, que el alma escarpa. Que la oscuridad borre ese solitario lugar a partir de esa existencia.
Cielo enfurecido que muestra las señales desnudas de una distancia a punto de estallar. Los marineros en sus ataúdes de madera lloran oceános de dulzura a través de las olas. Relámpagos que más bien son puñaladas en el fragmentado horizonte, alcanzando con su manos una incauta tierra. Sin una luz que seguir, apagada por las lluvias. Sin recuerdos que los unan ahí. ¿Que escondes marea? Fríos años de espera para los vientos del cambio susurrando la pagada penitencia. Sol de la mañana que rehúye la cara del joven hombre. Extraña solo al mundo.
Con un esfuerzo final golpeo las olas hasta el mundo. Buscando sólo unas respuestas que tal vez sólo el horizonte espera.

No hay comentarios:

Publicar un comentario